jueves, 7 de agosto de 2008

Fastidiosos en el cine

Hace algunas semanas, tal como me pasó con las instrucciones de cómo no tomarse fotos para el pasaporte polaco y con las aventuras de la gringa en Río de Janeiro, haciendo la traducción de un roundup para Global Voices Online encontré otro divertido post que creo que vale la pena compartir.

El post original pertenece al blog kuwaití My haven (Mi refugio), cuyo autor es Angelo, que se define así:

Un hombre tímido con una actitud impredecible. Un observador con un limitado alcance de observación. Un psicólogo en hacer quién tiene pasión por la moda. Una persona optimista que no tiene miedo de vivir en su propia imaginación y fantasía. Caminante más que corredor, con una personalidad sarcástica antes que humorística.

[...]

Su blog es su refugio final cuando todo parece ser un fastidio, que lo exhorta a evaluar y compartir sus ideas y sus propios descubrimientos al mundo, o al menos, a sus colegas vecinos en la blogósfera.

Pedí la autorización de Angelo para traducir su post, y tres semanas más tarde recibí su simpática respuesta, que acá traduzco:

Hola Gabriela,

Soy Angelo de Final Haven. Primero que nada, me gustaría hacer llegar mis saludos desde Kuwait a todos los agradables amigos en el Perú. Te deseo una larga vida llena de feliciidad. En cuanto a mi post, tienes mi absoluto permiso de traducirlo al castellano. A decir verdad, me encantaría verlo traducido a uno de los más bellos idiomas del mundo. Manténme al tanto cuando termines de traducir el post, me gustaría verlo :)

Oh, y disculpas por esta respuesta tardía. Estuve completamente atrapado con todo por acá y como que abandoné mi blog las últimas tres semanas. Espero que eso no te haya causado ningún inconveniente.

Adiós... (sic)

Y a continuación, su post:

La vez pasada, resumí furiosas ideas respecto de la gente fastidiosa con las que te encuentras en Starbucks por todo Estados Unidos, pero esta vez me voy a dedicar a la gente que está destinada a volverte loco mientras ves una pelicula en Kuwait.

Ahora, antes de empezar a murmurar, podrías preguntar 'Angelo, ¿por qué eres tan amargado?'

No soy amargado. De hecho, me han dicho que soy la persona más encantadora, y como psicólogo en entrenamiento, estoy condicionado para no juzgar duramente a la gente ni hacer juicios rápidos, pero no puedo contener mi rabia y frustración en nombre de la ciencia. Por eso, decidí abusar de mi blog como forma de liberar mis inquietudes. [...]

En ningún orden en particular, acá está mi lista:

El Hombre Pato

Generalmente, no se permiten patos en los cines, pero parece que eso si pasa en Kuwait. Es maravilloso ver bellas criaturas de Dios manifestadas en seres humanos; sin embargo, escuchar fuertes estallidos de risas “kaaaaak” mientras ves una película no es la cosa más encantadora en mi honesta opinión. Si tuviera permiso, seguiría las respetables leyes de la selva dentro del cine, y me volvería el cazador que busca su presa con una escopeta, destinado a arremeter contra el Hombre Pato en la cabeza.

La chismosa

No estamos chismeando, estamos transmitiendo en cadena

¿Sabías que Nora acaba de recibir el vestido que se mandó a hacer en Francia? ¿Y has escuchado que Aseel acaba de dar a luz una bebé defiorme? ¿Y puedes creer que Othman acaba de divorciarse de su esposa, Abraar, después de dos meses de matrimonio? ¿No? Entonces creo que no has estado yendo al cine últimamente porque parece que es el centro perfecto para atiborrarte de chismes sin sentido y chismorreos que harían que a cualquier persona le crecieran cuernos solamente por escucharlos. De verdad, no hay besos para ti, chismosa, porque te mereces una serie de puñetes y patadas en la barriga.

El/La majadero(a) del Bluetooth

Quiero que tú apagues tu celular

Incontables magos de la alta tecnología han aclamado al Bluetooth como uno de los más convenientes inventos de la industria inalámbrica, pero déjale que los árabes conviertan un trabajo de arte en una de las más abusivas herramientas jamás creadas. El problema es la gente reacia a apagar sus benditos teléfonos celulares incluso después de que apareciera un mensaje en la pantalla gigante ordenándoles que lo hagan. A veces, simplemente quisiera que la pantalla desarrollara un brazo y que caheteara al tonto abusivo del Bluetooth. Ahora, si eso no te molesta, ¿qué tal un timbrado tosedor que se activa al recibir un mensaje de Bluetooth cada bendito segundo.

Encantador, ¿no es cierto?

Los niños del Infierno

¿No crees en el infierno o mueres por conocerlo? ¡No hay problema! Todo lo que tienes que hacer es ir a una película apta para todos entre 6 y 7 pm en uno de los cines más concurridos del país, mientras te armas con botellas de agua bendita o verson del Corán, y estás listo. Fue extremadamente encantador ver Las Crónicas de Narnia: El Príncipe Caspian mientras un chiquillo del asiento de adelante se aburrió de ver una historia complicada que su diminuto cerebro no pudo absorber, y en vez de eso decidió mirarte fijamente. Sin mencionar los gritos, las hiper risas y las incontables patadas de burro de las hordas de niños detrás de ti. Aunque entones “que el poder de Cristo te obligue” mientras metes la cruz debajo de sus gargantas, no funcionará.

El payaso que aplaude

Cuando una gran película llega a su final, se considera un privilegio del decoro dar una ronda de aplausos como agradacimiento por el buen rato que pasaste viendo la película. Sin embargo, de tanto en tanto estás destinado a encontrarte con un tipo pesado que "sobre aplaude" en cada escena, hasta cuando el héroe de la película se encuentra con su sorprendente, inesperada muerte al final de la película. Traté de buscar el Manual de Diagnóstico y Estadísticas de Enfermedades Mentales -IV edición para encontrar un mal que describa este síntoma, y felizmente lo encontré. Creo que esty sorprendido de descubrir que la enfermedad de Tourette es un síndrome común ente la juventud kuwaití. Es el caso perfecto para mi disertación doctoral.

Felizmente que no es amargado...

Pero hablando en serio, tiene razón en mucho de lo que dice. A mí tampoco me gusta que un teléfono suene a media película, y menos que el dueño del celular entable una conversación interminable. También me disgustan las hordas de adolescentes disforzadas o, peor, las adultas disforzadas. Y me molestan los susurradores (algo que aparentemente no hay en Kuwait), por no mencionar a los que llegan al cine con comida de todo tipo, como pizzas, hots dogs. Aunque de esto último habría que responsabilizar al cine más que al público que se va a ver una película directamente del trabajo.

Aparentemente no hay gente impuntual en Kuwait, porque Angelo no menciona a los tardones que se quedan parados en mitad de las escaleras buscando sitio, y tapando con toda su humanidad a los que están detrás.

Creo que más de una vez nos hemos encontrado con especímenes así. Y con toda seguridad, al menos una vez en nuestras vidas, debemos haber sido un espécimen así. Quien esté libre de pecado...

8 comentarios:

  1. Últimamente he ido seguido al cine y sí pues, te encuentras de todo, pero la verdad... no me di cuenta, estuve muy abstraido en la peli... y en quien me acompañaba. Saludos.

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  2. La cosa se pone peor cuando vas sin compañia. Ahi si que no se te escapa ningun detalle fastidioso.

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  3. Tampoco falta el que va contando lo que va a pasar o va diciendo lo que piensa de los actores, el que come miles de caramelos haciendo un ruido espantoso con el maldito papelito ,el que va enfermo con tos, el que mide 2 metros y se te sienta adelante jajja bueno eso es mala suerte en realidad, pobre el que mide 2 metros.
    Por eso yo he optado por ir al cine solo cuando la película tiene una excelente fotografía o audio que solo se pueden apreciar en la pantalla gigante, sino, las veo tranquila en DVD en mi casa.
    Besos

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  4. Veo que esos fastidiosos pululan en todas partes y algunos se vinieron a México, aquí además están los que te golpean el asiento con sus pies, los que los oyes todo el tiempo darse de besos o los que te cuentan la película en voz alta, ah!! y los que gritan de emoción a cada rato. Digo, yo soy muyy nerviosa pero "grito quedito"

    poco a poco voy viendo tu blog y me gusta mucho, te voy a poner un enlace. Saludos desde México. Hilda

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  5. Cada quien tiene su propio fastidioso en el cine. Como lo digo en el post, a mí me molestan los que llegan tarde y deciden dónde sentarse mientras te tapan toda la pantalla.
    Seguramente todos debemos haber el fastidioso de otro en el cine... por lo menos una vez.

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  6. Tiene razón todo lo que dice el Blog.. solo que muchas veces no nos damos cuenta en el momento..

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